na novela como Alcander, en la que se reunen vampiros, inmortales, eternos, licántropos, náyades o espumeros, tiene personajes suficientes dignos de pronunciar frases que deben quedar para la posteridad. Estas son algunas de las que creemos que no pueden pasar al olvido.
- -Morir, Shoumila. Gratificante sentencia. Morir sería al menos algo a lo que aferrarse en esta vida.
- -El bosque no permitirá que te vayas.
- Los espectros oscuros cada vez se metían mejor en su papel y costaba distinguir quién era quién.
- Y pronunció aquella pregunta con la respuesta palpitando en su garganta.
- La subespecie miró sus ojos. Eran antiguos y destilaban una profunda mirada de eternidad.
- Solo fue capaz de escuchar el sonido ciego de una llamada mas fuerte que sus excusas.
- Extendió sus brazos y cerró los ojos dirigiendo su mirada hacia el cielo.
- Le lanzó una intensa mirada llena de anhelo, como la que vertiría un adicto que tiene frente a él la sustancia mágica que le hará sentirse bien, pero siendo consciente de que después le arrojará al infierno de la abstinencia.
- Simplemente hemos sentido una atracción irresistible el uno por el otro, y no por ello debemos jurarnos amor eterno.
- Solo te diré que Cronos, … no es más que una esquirla alojada en mi amígdala, una caries en mi diente, el pus de uno de mis granos.
- Eres un alma muy antigua Genjis. Tal vez hayamos coincidido
- Cuando el pozo negro de su boca se abrió para hablar, dejó escapar un hedor de mil cadáveres junto con su voz ronca y temblorosa.
- Se que estamos exaltados frente a lo que se avecina. Que las dudas nos estrangulan y la incertidumbre anida en el espíritu de todos. Pero solo os pido fe. Sin preguntas, sin reproches, tan solo la esperanza arde en el corazón guerrero antes de la batalla final y el valor que sé que habita en cada uno de vosotros.
- Soy un embustero, un tramposo, un verdadero bastardo que adereza su almuerzo con imbéciles como tú.
- No muestres tu miedo ni tus pensamientos. No te detengas escuches lo que escuches ni veas lo que veas.
- Nada es eterno. Simplemente hay que conocer al enemigo para doblegarlo.
Fuentes
Alcander Autor: Luisa Fernández, Editorial: Click ediciones – Grupo Planeta